Oímos frecuentemente en los medios que tal o cual persona conocida va a querellarse contra otra, pero si vives aquí y no has tenido que tratar con ningún despacho de abogados en Zamora es posible que no conozcas la diferencia entre querella y otras formas de señalar jurídicamente a alguien, como son la denuncia o la demanda.

Vamos a ver qué es una querella y cuándo puede convenirte interponer una querella.

Lo primero que tenemos que decir de una querella desde nuestro despacho, Bahamonde Abogados Asociados, S.L., es que es un derecho y no un deber. Así como si veo un coche saltándose un semáforo, por ejemplo, tengo el deber de denunciarlo aunque no me afecte a mí, las acciones injustas que nos llevan a poner una querella contra alguien suelen perjudicarnos a nosotros, y tenemos el derecho de querellarnos, es decir, de ser parte acusadora en el proceso criminal.

También podemos querellarnos aunque no seamos los ofendidos, e incluso aunque el delito sea público, es decir, susceptible de seguirse de oficio (las propias autoridades inician el proceso). La clave es que en la querella iniciamos el procedimiento de forma privada y queremos acusar nosotros y estar presentes en el proceso, ya sea el delito público o privado (por ejemplo, las injurias o calumnias).

Un despacho de abogados en Zamora como el nuestro te preguntará los hechos a consignar y te asesorará para defender tus intereses. Como en las denuncias, ten en cuenta que poner una querella no te quita derecho a ir a la policía. En este caso lo que se hace se llama “primeras diligencias averiguatorias” y pueden llevar a detener a la persona si hay motivos justificados.